El colágeno es un ingrediente fundamental para aportar tersura y firmeza a la piel.
Una de las principales preocupaciones de las mujeres en cuanto a belleza se refiere es mantener una apariencia joven. Con la edad, van apareciendo arrugas, líneas de expresión y manchas, influyendo en el envejecimiento cutáneo de nuestro rostro. Los tratamientos dermatológicos y cosméticos a base de colágeno son indispensables para combatir el proceso inexorable de la edad y retrasar sus efectos sobre la piel.
El colageno se utiliza para conseguir unos efectos inmediatos y duraderos para rejuvenecer la piel, aportando hidratación y reforzando los tejidos.
El colágeno ayuda a minimizar los efectos que los gestos producen en el rostro. Su acción hidratante excepcional suaviza y alisa la piel de forma muy eficaz con resultados sorprendentes. Eso sí, tienes que ser constante en su uso
El colágeno permitirá actuar como “colchón” sobre las fibras de la dermis y recuperar la piel, aportando un volumen y elasticidad únicos.
En definitiva, utiliza el colágeno para sentir tu piel más firme y tersa. Es una proteína mágica, el secreto para mantener la piel joven por más tiempo.